Me encantan los tulipanes y he decidido escribir algo sobre tan hermosa flor. Las primeras semillas de tulipán llegaron a Europa a finales del siglo XVI procedentes de Turquía. En el año 1554, el embajador austriaco, Busbecq quería saber el nombre de una flor desconocida que le había dejado asombrado. Un señor sobre su turbante llevaba esta flor. Él preguntó al traductor "¿Cómo se llama esto?" y el traductor pensó que le preguntaba por el turbante, por lo que le respondió en lugar de "lale" como "tülbent". Así, fue puesto el nombre de tulipán en Europa. El botánico Carolus Clusius inició el cultivo del tulipán en el jardín botánico de Leiden (Holanda), a partir de semillas y de bulbos enviados desde Turquía. Holanda es el líder absoluto de esta actividad debido a sus condiciones climáticas y a un excelente perfil comercial. No sólo cuenta con más del 55% del área cultivada en el mundo (más de 10.000 hectáreas) sino que es el moderador del intercambio comercial. Un dato para entender el elevado valor que los holandeses le dieron a esta flor en el siglo XVII quedó registrado para la posteridad por un escritor de la época, de apellido Munting. En 1636, una tonelada de queso costaba 120 florines, y en una transacción entre dos comerciantes uno de ellos pagó 2500 por un tulipán; es decir, más de lo que había pagado por 20 toneladas de queso.Siempre he dicho que no me gusta que me regalen flores, pues soy demasiado práctica y además, prefiero verlas vivas en el campo y no muertas. Sin embargo, a un tulipán no me puedo resistir. Así que chicos, ya sabéis!...
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