CARNAVAL, ¿TE QUIERO?...

No se por qué razón, pero creo que nunca me han gustado los carnavales. Quizás porque desconfío de quien cambia de actitud simplemente por ocultar su identidad, por los niños tirando esos odiosos petardos ó porque un 15 de febrero en pleno carnaval de hace 16 años, perdimos en mi familia a una joven mujer llena de virtudes y amor para regalar, como hacía siempre.
Parece que esta colorida fiesta, tiene su origen en celebraciones paganas y algunos historiadores, remontan su origen a hace más de 5000 años (a las antiguas Sumeria y Egipto). El carnaval, se celebra inmediatamente antes de la cuaresma cristiana y en la actualidad, se cuentan numerosos en todo el mundo, teniendo especial relevancia el de Río de Janeiro. En España, destacan el carnaval de Tenenife y Cádiz.
Sin lugar a dudas si yo tuviera que participar en alguno, lo haría en el carnaval de Venecia por su gran elegancia y misterio. Me parecen espectaculares esas inexpresivas máscaras de porcelana pintadas desfilando por esta hermosa ciudad flotante que sin duda, proporciona un entorno perfecto (aunque por lo que he leído, se ha convertido en un reclamo turístico tan importante que los venecianos se escapan de allí en esta temporada).

A todo esto, recuerdo mi visita a Venecia (hablo del año 1.992) en la que a pesar de verlo todo bastante descuidado (ese año hubo unas inundaciones tremendas llegando a cubrirse la plaza de San Marcos), aprovechamos para pasear en góndola, por los numerosos puentes y callejuelas, a comprar cristal de Murano y hasta reconocí en una tienda al popular presentador de televisión ya desaparecido, Joaquín Prat que muy amablemente se fotografió con nosotros (simpatiquísimos; él hablando de la "sidrina asturiana" y su mujer haciendo las fotografías con todas nuestras cámaras colgando).

Aquí está la foto para la posteridad y también para los incrédulos (que hubo muchos en aquella excursión del instituto -se tuvieron que tragar sus propias palabras, claro está-). Por cierto, soy la de la mochila de colores (la de arriba a la derecha del todo). Unos recuerdos muy bonitos, por no hablar de "mi primer beso" (en Venecia tuvo que ser), es algo que como comprenderéis, no se puede olvidar nunca!.
Carnaval... Quizás algún año lo disfrute realmente y valore esta fiesta. Por cierto, me ha gustado mucho lo escrito por JB en su blog "La belleza del desencanto", en su post "disfraz de Clark Kent", ojalá todos carnavaleásemos con un disfraz de persona normal para variar (yo también creo que el disfraz no era Superman sino Clark Kent)...
Felices carnavales a tod@s!!!